La OMS ha actualizado sus orientaciones evolutivas para el tratamiento de la COVID-19 con el fin de incluir una recomendación condicional relativa al molnupiravir, un nuevo medicamento antivírico.

Este es el primer fármaco antivírico de administración oral que se incluye en las directrices terapéuticas contra la COVID-19. Dado que es un medicamente nuevo, se dispone de pocos datos sobre su seguridad. La OMS recomienda el seguimiento activo en lo concerniente a la seguridad del medicamento, junto con otras estrategias destinadas a mitigar posibles efectos nocivos.

A raíz de estas preocupaciones, así como de la falta de datos, molnupiravir se debería administrar solo a pacientes con COVID-19 no grave que corran el máximo riesgo de hospitalización. Estos suelen ser personas no vacunadas contra la COVID-19, personas mayores, personas inmunodeprimidas y personas con enfermedades crónicas.

No se debería administrar este fármaco a niños ni a mujeres embarazadas y lactantes. Las personas tratadas con molnupiravir deberían tener un plan anticonceptivo, y los sistemas de salud deberían asegurar el acceso a pruebas de embarazo y anticonceptivos en los lugares de consulta.

Con la supervisión de un dispensador de asistencia sanitaria, el molnupiravir, una pastilla de administración oral, se toma a razón de cuatro pastillas (800 mg en total) dos veces por día durante cinco días, en un plazo de cinco días desde la aparición de los síntomas. Administrado lo antes posible tras la infección, el medicamento puede ayudar a evitar la hospitalización.

La recomendación formulada hoy se basa en nuevos datos obtenidos en seis ensayos aleatorizados controlados en los que participaron 4796 pacientes. Este es el mayor conjunto de datos disponibles hasta el presente sobre ese medicamento.

Junto con una recomendación sobre molnupiravir, esta novena actualización de las directrices evolutivas de la OMS sobre opciones terapéuticas incluye información actualizada relativa al casirivimab-imdevimab, una combinación de anticuerpos monoclonales. Sobre la base de pruebas científicas que revelan la ineficacia de esta combinación contra la variante ómicron, la OMS recomienda ahora su administración solo cuando la infección esté causada por otra variante.

La disponibilidad del molnupiravir no está generalizada, pero se están tomando medidas para ampliar el acceso, en particular mediante la firma de un acuerdo de licencia voluntaria. El Acelerador del acceso a las herramientas contra la COVID-19 (Acelerador ACT) está proporcionando un suministro limitado a países que afrontan restricciones para el acceso.



Además, la OMS invitó a los fabricantes a que presentaran sus productos para su precalificación, y, en ese contexto, se están evaluando algunos fabricantes de molnupiravir. La OMS evalúa la calidad, seguridad y eficacia de productos médicos para las Naciones Unidas y otros grandes proveedores de esos productos a países de ingresos bajos y medianos. Un mayor número de fabricantes de calidad garantizada por la OMS implica que los países tienen más opciones de productos y obtienen mejores precios.